Qué es, cómo funciona la Inversión Socialmente Responsable (ISR) y por qué tu ONG tendría que tenerla en cuenta
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Hace unas semanas os contamos cómo hacer una gestión activa del patrimonio en las entidades del Tercer Sector y que para ello era necesario hacer el cambio de perspectiva y pasar del ahorro a la inversión. Hoy queremos profundizar en un tema muy relevante para las ONG: las inversiones de alto impacto.
Para alguien que no tenga familiaridad con el funcionamiento de la gestión de fondos privados en entidades puede resultar contradictorio que una entidad haga inversiones con su patrimonio, pero lo cierto es que hay formas de hacer una inversión sin dejar de lado el impacto social.
Un ejemplo de ello es lo que ha hecho Anesvad, una fundación bilbaína que lleva más de medio siglo luchando contra las Enfermedades Tropicales Desatendidas en África a través de diversos programas de cooperación al desarrollo. Su forma de financiación suele ser la misma que la del resto de ONG: a través de subvenciones y donaciones. Pero también han querido dar un paso más y su apuesta ha sido la Inversión Socialmente Responsable (ISR). Este tipo de inversión tiene en cuenta factores ambientales, sociales y de buen gobierno a la hora de invertir y no pierde de vista la rentabilidad, clave para la gestión de los fondos y para generar un impacto creciente en el tiempo.
Para profundizar en la Inversión Socialmente Responsable, Anesvad ha realizado un informe sobre la percepción de este tipo de inversión en la población española. En él se indica que, de acuerdo con la mayoría de estudios realizados, la ISR es tan eficiente o más, desde un punto de vista de rentabilidad-riesgo, que la inversión tradicional.
Hay tres factores clave a la hora de considerar hacer una ISR:
- Credibilidad: tan solo 4 de cada 10 ciudadanos españoles sabe en qué consiste este tipo de inversión, por lo que es muy necesaria la divulgación sobre el tema que acabe con ciertos mitos y destaque sus beneficios.
- Transparencia y control: uno de los mitos que hay sobre la ISR es la ausencia de valores en el mundo de la inversión, por lo que es muy importante la transparencia en las operaciones que se realicen por parte de las personas encargadas de gestionar el patrimonio.
- Indicadores: es importante contar con medidores que demuestren el impacto positivo de la inversión que se quiere realizar.
Las estrategias que siguen los fondos de inversión ISR son:
- Evitar activos emitidos por compañías pertenecientes a sectores poco éticos.
- Invertir en empresas con un buen gobierno corporativo.
- Convertir al ahorrador en un sujeto activo en el desarrollo sostenible.
Desde SpainSIF, el primer foro nacional de la ISR en el que conviven numerosas empresas y gestoras de activos especializadas en productos de inversión socialmente responsable, destacan algunas de las inversiones socialmente responsables mejor valoradas por el mercado español:
- Microwd: ofrece microcréditos para mujeres emprendedoras, planes de pensiones, hipotecas para vivienda social, fondos de ahorro y microseguros, gracias a la colaboración de inversores colectivos. En sus cuatro años de vida, Microwd ha financiado a cerca de 5.000 mujeres gracias al capital confiado por casi 400 inversores.
- OkioCredit: es una cooperativa de crédito centrada en la banca ética. Sus proyectos han eliminado 177.749 toneladas de CO2 y un total de 71.653 hogares tienen hoy en día acceso a energía limpia.
- Creas Impacto: es el primer fondo de impacto social europeo aprobado en España por la CNMV. Especializado en inversiones en educación, asistencia, servicios medioambientales e innovación social.
- Ética: fue pionera junto con Degroof Petercam en lanzar la primera Sicav (sociedad de inversión de capital variable) en España que únicamente invierte en fondos ISR. Presente en el mercado desde 2017, DP Ética Valor Compartido gestiona actualmente 2,8 millones de euros y en años anteriores ha acumulado una rentabilidad del 5,09%, en línea con su objetivo.
- Gawa Capital: asesora a distintos fondos en la gestión activa del impacto social en cada una de sus fases. Desde Gawa y su equipo invierten, entre otros proyectos, en empresas sociales que tengan impacto en el acceso a servicios básicos en los países en vías de desarrollo.
Para terminar de hacerte ver el atractivo, te diremos que este tipo de inversión resulta cada vez más demandada y ha crecido en los últimos años desde los 90 a los 229 millones de euros gestionados en España, según un reciente estudio presentado por SpainNAB.