Al igual que el ciclo de la gestión se construye con las fases de Planificación, Recogida de datos y Evaluación, el ciclo de la gestión económica comprende las fases de Presupuestos, Contabilidad y Balances.
El Patrimonio es la parte de la financiación de una entidad que no es exigible por terceros, es decir, que no hay que devolver.
El Activo es el conjunto de bienes y derechos de una entidad, incluyendo su tesorería.
Es la transmisión de la propiedad de un bien o un derecho. En este sentido, la venta de un servicio es la transmisión de la propiedad del derecho a recibir ese servicio.
Hay varias maneras de clasificar los tipos de contabilidades de una entidad pero, tratándose de una ESFL, podemos simplificarlas en:
Las dos son complementarias entre sí, y nunca son incompatibles o contradictorias.
Las inversiones financieras temporales son aportaciones económicas realizadas a un tercero, con la intención de que sean devueltas a corto plazo, y de generar un rendimiento económico para la entidad. Existe un código de conducta elaborado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores que establece unas normas y límites para las ESFL en materia de inversiones financieras.
Es una asociación cuyos fines son de interés general y ha sido reconocida como tal por el Ministerio del Interior o el órgano competente, en caso de transferencia de esta capacidad a las CCAA.
Un presupuesto es una previsión económico-financiera sobre lo que ocurrirá en el futuro en la entidad, basado siempre en información procedente del proyecto, la experiencia anterior, las decisiones pasadas y previsiones de hechos futuros.
Fundamentalmente se incluyen los siguientes conceptos (aunque puede haber otros):
Un ingreso es un aumento del valor del Patrimonio derivado de la actividad de la entidad. En este sentido, hay aumentos del Patrimonio que no son considerados ingresos como tales, como por ejemplo, las aportaciones directas a la dotación fundacional o al fondo social.